Otro mundo se abrió a nosotros

Tanto énfasis que he dado a nuestro grupo de teatro de San Marcos puede darse incluso de igual manera a nuestro saltito por delante para los que queríamos más.
Los sábados se nos presentó para unos pocos de nuestro grupo (los mayores) de entrar en los talleres de teatro del Centro Cívico de Virgen de los Reyes.
Allí nos dividieron por grupos y aunque al principio pudo dolernos quizás de no estar todos juntos, no nos arrepentiremos en la vida de ello porque si no, no hubiésemos conocido a gente nueva que serían nuestros compañeros en esa jornada de talleres.

Al principio, eran todos los sábados y nos divertíamos con los juegos que preparaban, las actividades, perder la verguenza y la timidez y soltarse libremente. Nunca podré olvidar el clásico de todos paseando por la estancia y te preguntaban: Curro, ¿dónde estamos?
Tenías que responder con lo primero que se te ocurriera e ir mprovisando por el camino y los demás tenían que hacer según tu decidías.

Se acabaron esos días de improvisaciones, imaginación y los monitores ya nos presentó la obra que haríamos nuestro grupo en esa jornada. En todo ese tiempo ya los integrantes del grupo nos habíamos conocido y ya nos desenvolvíamos perfectamente.
Cada grupo tendría una obrita de teatro para ensayar y representar en Febrero.

Cuando leí el papel del personaje que mis monitores habían elegido para mi, puf..vaya corte, TARTAMUDO, no podía creer que tendría que hacer de tartamudo.

Los primeros ensayos fueron un infierno, el tartamudeo no me salía (recuerdo que me vi Harry potter y el laberinto del fauno para tener una ligera idea, y la cosilla mejoró un poquito)
Pero ya la cosa se complicó, ya no iríamos los sábados solamente, sino también entre semana cuando pudíeramos y compañeros como Macarena y Álvaro solo podían los fines de semana.
La cosa fue avanzando pero, no muy bien: no nos sabíamos los papeles y así mucho no podíamos avanzar. Recuerdo esas broncas de nuestro monitor Nacho que helaban la sangre y te dejaba un sentimiento de culpa que tú decías: "normal que se enfade, si tiene toda la razón"

Pero a pesar de eso nunca faltó el humor y las risas entre los ensayos.
Para mi opinión, estos días de ensayos interminables en un principio pasaron volando y ya estábamos a una semana de estrenar, al menos ya los papeles estaban sabidos.
Fueron esos últimos días los más intensos y agotadores. Y además con los agobios y las prisas no nos veíamos nosotros en el escenario en tan pocos días.

Hora tarde de la badrugada: terminamos en último ensayo y vamos cada uno a casa, al día siguiente estrenamos.
Por supuesto ahí ya el TARTAMUDEO más o menos me salía y todos sabíamos nuestros juegos y actuaciones.
Día de la actuación, el grupo se agrupa en una sola persona y somos todos como uno solo; hora de la verdad, lo que salió, salió.
Entre nervios y últimos preparativos salimos a escena empezando por Alba y Macarena que encabezan y abren la obra. Los demás esperando nuestro turno de escena y rezando para que todo saliera bien. Risas del público y aplausos; todo acabó, un éxito. Había acabado la primera actuación (al día siguiente era la última)
Conmovidos y satisfechos de nuestro trabajo lo celebramos por todo lo alto. Me entró una alegría cuando mi monitor vino a mi y me dijo:
"**Cabrón**, todo este tiempo que me has angustiado en los ensayos porque no te salía el tartamudo y, ¿ahora lo has hecho que parecía de verdad?¿y por qué no en el ensayo eh?".
Todos mis compañeros, para sorpresa mía, me felicitaron por mi tartamudeo. Me crecí en el escenario y no me daba ni cuenta.

Es algo que sientes por dentro, cuando sales a escena y cuando dices tu gracia preparada ves que el público se ríe y disfruta con tu actuación, esto no se siente en otra situación ni parecida ni nada; sensación única.
Al día siguiente ya menos nerviosos repetimos la actuación y...
....
...se acabó.

La lotería que así se llamaba la obra había sido un éxito y había acabado.
Pero algo de eso se queda, la gente que allí conoces que ahora echo de menos y a quienes dedico este texto. Gracias a todos: José, Soledad, José(mi hermano) Hiniesta, Inma, Paula, Macarena, Álvaro, Salud, Alba y a nuestros monitores: Nacho y Fernando.
Gracias a todos por esta experiencia inolvidable y por vuestra dedicacón al grupo.
Hoy tenemos más amistades que cuando entramos y espero veros pronto a todos.
Nuestro grupo Virgen de los Reyes ; La Lotería, la mejor lotería que me hubiese tocado nunca.
Gracias por todo.